viernes, 16 de marzo de 2012

El Medievo en la Studio 52

Los comienzos de la Galería Studio 52 estuvieron llenos de actividades innovadoras. He aquí una muestra de ello. Fueron los comienzos de la tertulia de Siroco

ENSEÑANDO A VER
DIDÁCTICA EXPOSICIÓN DE PINTURA MEDIEVAL CORDOBESA

19 Ilustraciones a color y en blanco y negro desmenuzan un auténtico retablo del siglo XIV
En un amplio esfuerzo artístico-didáctico, protagonizado por el Cabildo Catedralicio, la Galería Studio 52 y don Manuel Nieto Cumplido, ha sido montada la exposición de «Pintura Medieval Cordobesa». Tal exposición puede considerarse como una continuación del propósito iniciado el año anterior con la «Muestra de orfebrería cordobesa» de ofrecer al público tesoros artísticos de nuestra provincia que permanecen casi del todo desconocidas.


En la presente ocasión se trata del antiguo retablo de la capilla de San Pedro, de la Mezquita-Catedral, capilla que fue donada a solicitud de Enrique II por carta dada en Toledo el 16 de octubre de 1368.


El mencionado retablo, hacia 1390, se debió instalar ante la fachada del Mihrab de la Mezquita y posteriormente ha sufrido diversas vicisitudes, entre las que destacan su desaparición de la capilla de San Pedro en 1826 y resguardo en las atarazanas al ser retiradas del culto. Posteriormente, hacia 1892, fueron enviadas a Madrid, donde figuraron en una exposición, donde parece que no tuvieron mucho éxito. Finalmente, en la actualidad, fueron enviadas a los técnicos del Museo del Prado para proceder a su restauración y colocadas a la entrada de la Sala Capitular.
EL RETABLO
El retablo se compone de las cinco tablas presentadas en la exposición. En la central figura el «Retablo de la Virgen de la Leche», que aparece flanqueada por dos ángeles. A sus pies, y de rodillas, aparecen los retratos de los donantes presentados a la Virgen y al Niño por San Ildefonso y por San Bernardo, respectivamente.

Dos tablas más representan a San Pedro y San Pablo, titulares de la capilla, y en dos más Santa Catalina de Alejandría y San Francisco de Asís.

El conjunto ha sido calificado por los más prestigiosos tratadistas de arte «altamente contemplativos, lírico e idealista, que huye tanto de los descensos de la realidad como de las contorsiones expresionistas y dramáticas», según estimación de Ricart.

En cuanto a la posible atribución se han presentado problemas. Ni el extenso tratamiento fotográfico ni la utilización de rayos X ha logrado dar algún tipo de pista en este sentido. Es este punto especialmente interesante por las posibles relaciones que pudiera tener con los primitivos pintores cordobeses. Es en esta línea donde Nieto Cumplido plantea la opinión de que posiblemente su autor sea un pintor cordobés «en la medida en que se pueda llegar a conocer la existencia de una verdadera escuela de pintura medieval cordobesa durante la segunda mitad del siglo XIII y todo el siglo XIV». Campo éste amplio para la investigación y que ofrece gran riqueza de matices y posibilidades.

Independientemente de esta línea de investigación artístico-histórica hay que señalar el cuidado puesto en la presente exposición por los organizadores que, con un amplio tratamiento fotográfico e ilustrativo, marcan una pauta valiosa para esa pedagogía popular del arte español que está tan sin hacer. Una exposición que, con fines didácticos —«enseñar a ver»—, ofrece al público una ocasión valiosa de profundizar de la mano de la pintura medieval cordobesa en algo tan esencial como es el arte.

E.
 Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 11 de enero de 1974

jueves, 8 de marzo de 2012

Expone Cristóbal Toledo

En aquellos tiempos se recibían por navidad en muchas casas la oferta de crismas pintados por artistas mutilados. Era un grueso sobre que había que devolver o pagar mediante giro. Y qué cerca estaba uno de sus autores
 
CRISTÓBAL TOLEDO PINTA CON LA BOCA LA VIDA QUE PASA

-ES UNO DE LOS TRES PINTORES MUTILADOS QUE HAY EN ESPAÑA
-Su pintura -impresionismo a la española- tiene garra y futuro

Cristóbal Toledo ha abierto, ilusionado, su exposición de Pintura en la Galería Studio 52. Un conjunto de 21 óleos y 7 dibujos, que tienen la particularidad de haber sido realizados con la boca por impedimento físico.Produce impacto el impresionismo de sus cuadros, tanto por su cromatismo como por lo que encierra de lucha y esfuerzo.


—Cristóbal, ¿desde cuándo pintas?
— Llevo aproximadamente quince años pintando.

— ¿Qué te impulsó a hacerlo?
—Un deseo de explicar de esta manera, delante de los demás, lo que sentía.

— ¿Cómo catalogas tu pintura?
—Creo que tiene un cierto impresionismo. Pero impresionismo a la española; es decir, técnica impresionista, buscando más profundidad de la que la escuela impresionista dio de sí.

—Al tener que servirte de la boca para pintar, ¿qué te cuesta más trabajo, el óleo o el dibujo?
—Para mí, es igual...

LLEVAR LA VIDA AL CUADRO

— ¿Cuánto tiempo tardas en cada cuadro?
—Depende.

— ¿Cuáles son tus temas preferidos?
—La figura, desnudo, retrato, paisaje...

— ¿Cómo has aprendido a pintar?
—Haciendo reproducciones, museos. Viendo la vida que pasa cerca y tratando de llevarla al cuadro.

— ¿Qué representa para ti cada exposición que realizas?
—Fundamentalmente, un encuentro conmigo mismo, demostrar lo que soy capaz de hacer, lo que he hecho y tratar siempre de superarme.

—Y, en concreto, ¿qué esperas conseguir de esta exposición que inauguras ahora?
—Quizá esté mal que yo lo diga.

DELEGADO DE ARTS GUILD

Cristóbal Toledo es miembro del Comité de Honor y delegado para Andalucía de International Arts Guild, de Montecarlo.
— ¿Qué es esto?
—Es una sociedad internacional  que agrupa pintores, dibujantes, grabadores de diversos países y trata de promocionar el arte. Organiza anualmente una exposición en Montecarlo, donde otorgan los premios Palma de Oro.

—También perteneces a la Asociación Internacional de Pintores Mutilados que realizan sus obras valiéndose de la boca o de los pies. ¿Hay muchos pintores de estas características en España?
—Estamos tres.

— ¿Y en Andalucía?
—Hay otro compañero y yo. El tercero es un chico gallego.

— ¿En qué empleas tu tiempo, además de pintar?
—Escuchar música, escribo, poemas sobre todo. También algún que otro guión para TV.

— ¿Te ayuda alguien a hacer los cuadros?
—No, a pintar no me ayuda nadie.

—De los cuadros que presentas, ¿con cuáles te quedarías?
—Creo que con dos: "Maternidad del mar" y "Mari".

El amor de Cristóbal por su novia ha quedado reflejado en algunos cuadros.

—He oído decir que se te da mejor el paisaje. ¿Estás de acuerdo?
—Es que yo no soy retratista... Me gusta más el paisaje. Me gusta el retrato, no en plan fotográfico, sino en expresión libre; es decir, lo que yo quiero de la persona plasmada en el cuadro

— ¿Qué pintor prefieres entre los cordobeses?
—Hay un pintor cordobés que es el que más me gusta y que tiene categoría nacional e internacional: es Pedro Bueno.

— ¿Vendes con facilidad tus cuadros?
—Sí.

— ¿Qué sientes cuando te desprendes de ellos?
—Por una parte, duele, porque es algo propio que se va. Pero por otra es una satisfacción ver que lo que uno siente les puede agradar a los demás.

E. O.

Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 14 de febrero de 1974

jueves, 1 de marzo de 2012

Carta a un ministros de aquellos

En aquella columna que me dejó Uceda, y a pesar de que el señor ministro era mi jefe supremo, me atreví a  enumerar estas cosillas. Los datos son curiosos...

SIN PERDER EL COMPÁS

Vendrá el señor ministro...


Parece confirmarse la noticia de la próxima venida a la ciudad del ministro de Educación y Ciencia, señor Martínez Esteruelas. La fecha sobre el veintantos y los asuntos, como es usual en estos casos, permanecen discretamente velados. A su día llegarán los programas oficiales.


Así, no más plantearnos la educación en Córdoba, hay que partir de un censo de 150.000 alumnos en la provincia. Y tantos miles de alumnos dan lugar a problemas, a necesidades y a peticiones.

Pesan mucho los problemas materiales de la Universidad de Córdoba, pero es imposible ignorar que si bien los 102.000 alumnos de E. G. B están todos escolarizados, muchos de ellos lo están en condiciones poco dignas —teleclubs, pisos adaptados, caserones—, o en centros que, a pesar de su relativa juventud, no se adaptan a las necesidades que el propio Ministerio considera hoy necesarias para enseñar.

Los planes provinciales —interesantemente aliviados con los centros de los planes de urgencia—, todavía se ven agobiados por la tarea a desarrollar, por las insistentes peticiones de esos peregrinos modernos de los créditos, que son los alcaldes de pueblo.

Los 23.000 alumnos de Enseñanza Media son una cifra que, a pesar de su incremento, nos habla de cotas con las que no podemos quedarnos satisfechos. Piénsese, por otra parte, que miles de alumnos se hacen, al cabo del curso, muchos miles de kilómetros de autobús para asistir a clase a poblaciones distintas y relativamente distantes de sus domicilios. Esfuerzo del que conviene hacerse eco.

La enseñanza preescolar es otro punto vital, dada la progresiva incorporación de la mujer al trabajo fuera de casa, y, si bien es cierto que nada puede sustituir a la familia, no lo es menos que la enseñanza preescolar viene a paliar en parte este problema familiar.

Enseñanza profesional, enseñanza privada, formación del profesorado, educación permanente, mayores de 25 años, etc., son retos continuos que, si bien no suenan tanto como el problema de la Universidad, afectan a muchas más personas y tienen apremiantes necesidades, tanto de cantidad como de calidad.

Y no es que la Universidad me desmerezca, máxime cuando me afecta directamente, sino que conviene hacer justicia a todas las necesidades.


SIETE MIL UNIVERSITARIOS

Con selectividad o sin ella —las Cortes tienen la palabra—, se estima1 para el curso 75-76 en 7.000 la matrícula de universitarios. Los problemas de la Universidad de Córdoba son de base: otorgada por decreto —y bienvenida fue—, pero sin créditos, se ha debatido en estos años en plan ceniciento, sin brillantes realizaciones y al amparo de los organismos municipal y provincial, que, a pesar de su buena voluntad, —y «perras»—, no han logrado, lógicamente, grandes montajes, sino parciales adaptaciones de edificios.

Un solo comedor universitario, dos colegios mayores a tope, no son sino un reflejo de una carencia general. Excepto los centros ya existentes en la ciudad —ETSIA, Veterinaria, ETEA, Colegio Universitario—, nada nuevo nos ha traído la Universidad —e insisto en lo de bienvenida—, sino la demarcación territorial. Edificios, cátedras, rectorado, etcétera, no son sino sueños de futuro.

Y piénsese que hablamos de cantidad, de edificios, de dinero; porque la calidad es otro problema, cuya solución vendrá con el tiempo, con la solera, con los dineros de ahora.

El Colegio Universitario, que a duras penas logra mantener su nivel con el tenaz e ignorado esfuerzo de su secretario, también goza de tasas altas, y de problemas materiales. Sin embargo, es justo reconocer que ha sido la pieza de nuestro menguado conjunto universitario, que ha dado ambiente, espejismo de Universidad.

A título de ejemplo de todo esto, un conocido mío fue a solicitar en dicho colegio unas determinadas enseñanzas. Cortésmente le dijeron que no era posible. Insistió el hombre, y preguntó: ¿Y si traigo cien firmas? Y la respuesta que le dieron es reflejo de una apurada situación: si quiere esa enseñanza, lo que debe traer, en vez de cien firmas, son cien millones. Gráfico y auténtico.

Y si todo esto parece muy negativo, es lo que en mi opinión hay que pedir a la personalidad que esperamos, Dejémonos de cuadritos, gráficos y «realizaciones infraestructurales» (y el que sepa entender, que entienda), y planteemos nuestras necesidades lisa y llanamente. Seguro que se nos oirá.

Todo ello —y casi se me olvidaba decirlo—, independientemente del programa oficial, que, por otra parte, totalmente desconozco.

Eladio OSUNA

Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 19 de mayo de 1974
Foto de un colegio del Plan de Urgencia con los cristales rotos antes de su inauguración

sábado, 25 de febrero de 2012

Confesiones no católicas en Córdoba

Esta entrevista de José Serrano es una muestra más de cómo se aprovechaban las entrevista para la radio para publicarla en el periódico. Su interés radica en los datos que aporta de 1974, y en el talante de aquella época.

Cuatro confesiones no católicas existen actualmente en Córdoba



-"Nuestra postura: comprensión, respeto y oración para que se realice la Unidad"
-Declaraciones de don Manuel González Muñana, delegado regional de Ecumenismo


El delegado regional de Ecumenismo, don Manuel González Muñana, ha hecho unas declaraciones con motivo de celebrarse la "Semana de la Unidad". Amablemente ha contestado así a nuestras preguntas.

— ¿Qué es el Ecumenismo?
—El Ecumenismo puede definirse de múltiples maneras. El Concilio Vaticano entiende por movimiento ecuménico todas aquellas acciones doctrinales, espirituales y pastorales realizadas por cristianos y encaminadas a la unión de todas las Iglesias.


— ¿Qué significa la Semana de la Unidad?
—Entrar en el Cenáculo y, unidos a Cristo y a su oración por la unidad, rezar para que los deseos de Cristo se conviertan en realidad cuando Él quiera y como Él quiera. Para nuestra Comisión de Ecumenismo la Semana es tradicionalmente principio y fin de la actividad y esfuerzos ecuménicos desarrollados a través del año. La Semana cierra y abre un nuevo capitulo del Ecumenismo cordobés. Este año el Octavario está enmarcado m el corazón del Año Santo, año de reconciliación por la renovación de las Iglesias; de aquí que, como dijera el señor obispo en su pastoral sobre la Semana, «Este marco de singular interés al octavario por la unidad de los creyentes en Cristo, porque uno de los aspectos más importantes de la reconciliación que Dios quiere de nosotros es la unidad entre las distintas confesiones cristianas.

IGLESIAS ACTUALES EN CÓRDOBA

— ¿Iglesias actuales en Córdoba? ¿Dónde están enclavadas? ¿Sus características?
—En Córdoba existen, según nuestras noticias, fundamentalmente cuatro confesiones no católicas: Iglesia Apostólica, Iglesia Bautista, Testigos de Jehová y mormones. Existen otras confesiones religiosas libres e independientes, no fáciles de localizar. También hay en nuestra ciudad un resto muy pequeño de la más antigua iglesia protestante cordobesa. Se trata de la Iglesia Evangélica Española. La Iglesia Apostólica de Córdoba es una comunidad cristiana establecida en nuestra capital desde hace varios años. Yo tuve el honor de asistir personalmente a la inauguración de su local de culto, sito en la calle de Santa María de Gracia. Es una iglesia religiosamente muy seria. Ecumenista. Con un proselitismo sano y auténtico y evangélico. Intentan parecerse a la Iglesia que vemos reflejada en los Hechos de los Apóstoles. La Iglesia Bautista, establecida también desde hace varios años en nuestra ciudad, tiene su local en la calle José María Herrero (Ciudad Jardín). Al igual que la Iglesia Apostólica, es una confesión religiosamente seria, cristiana y proselitista, pero no con el falso proselitismo de algunas confesiones. Al hablar de los Testigos de Jehová y de los mormones, entramos ya en el terreno de las sectas religiosas, llamadas así para reunir una serie de características propias y muy especiales, que hacen que la Iglesia Católica, al igual que las restantes Iglesias protestantes, no las consideren como Iglesias. Su proselitismo es muy activo, siendo pocas las familias cordobesas a cuyas puertas no hayan llamado los miembros de estas sectas. Con ambas confesiones no cabe diálogo ecuménico, aunque si cualquier otro tipo de diálogo. Los Testigos tienen su «salón del Reino» en la calle Sagunto; los mormones, en Ciudad Jardín.


ACTITUD DE LOS CATÓLICOS
— ¿Actitud de los católicos ante los hermanos separados? ¿Y ante el proselitismo de las Iglesias?
—Nuestra postura ante los hermanos no católicos debe ser la que toda persona humana se merece; es decir, profundo respeto, sin zaherirles con palabras, gestos o acciones de cualquier tipo. Ha pasado el tiempo de los enfrentamientos pe1igrosos. Nosotros, los católicos, hemos de respetar las personas, aunque podemos y debemos no estar de acuerdo y disentir de sus doctrinas y modos de proceder. Esta es la postura general para todo hermano, para con todo hombre. El ir más lejos en nuestra actitud hacia los hermanos, depende de los grados de aproximación a que podarlos llegar con las demás confesiones. Es decir, hay que distinguir. Respecto a las Iglesias Apostólica y Bautista, nuestra actitud hacia ellos, ha de ser la de sentirnos real y verdaderamente hermanos; pues lo somos, y no dejaremos de serlo mientras recemos todos los días ellos y nosotros la oración del Padrenuestro. Es cierto que estamos separados, pero nuestra separación no es tan radical como la que existe, por ejemplo, con otras confesiones que ni siquiera son cristianos. Con estas dos Iglesias, siempre que ellas lo acepten, cabe el diálogo ecuménico, la colaboración y el esfuerzo común para que Cristo reine en el mundo, y desterrar así el materialista y ateísmo y demás peligros que constituyen campos comunes contra los que las Iglesias deben colaborar. Ellos y nosotros podemos proclamar juntos que Cristo es el Señor. En cuanto a los Testigos de Jehová no cabe contacto, diálogo, ni colaboración alguna en el campo estrictamente religioso. En otros terrenos, sí. Por lo que se refiere a los mormones, ciertamente es posible con ellos diálogo, colaboración, entendimiento en algunos puntos muy concretos de nuestra fe, aunque a niveles mínimos. A niveles máximos, en los valores humanos: amistad, colaboración humana, virtudes naturales..., etcétera.


— ¿Qué pediría a los católicos cordobeses para esta Semana de la Unidad?
—Una sola cosa: rezar. Rezar con Cristo y en Cristo para que la reconciliación de los cristianos y de las Iglesias sea una feliz realidad. El día 31 de enero, y como colofón de todas las oraciones por la unidad de los cristianos, tendrá lugar, en la parroquia de San Miguel, un solemne acto de oración y de reconciliación


—Gracias, don Manuel, por sus palabras.


J.S.


Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 25 de enero de 1974

viernes, 17 de febrero de 2012

Nueva Sala de Arte en el Círculo Juan XXIII

La labor de las salas de arte en el tardofranquismo fue esencial en la "apertura". El Juan XXIII también se sumó a esta labor a través de su propia sala, en este caso comprometida como el resto de su labor

SE INAUGURO LA SALA DE ARTE DEL CIRCULO CULTURAL JUAN XXIII



EL "EQUIPO CRÓNICA" PRESENTA PARTE DE SU OBRA

Quedó inaugurada la sala de exposiciones del Círculo Cultural Juan XXIII, con una muestra del «Equipo Crónica». Dicha exposición permanecerá abierta de 7,30 a 9,30, en la sede de la institución cultural, sita en Romero de Barros, 10.


Esta nueva sala que se añade a las ya existentes en la ciudad quiere tener, según intención de la directiva del Juan XXIII, un carácter netamente popular que obligará por una parte a presentar artistas lejanos de una línea comercial y mercantil del arte, y por otro, ofrecer posibilidades a nuevos artistas que tienen serias dificultades de presentar su obra en las salas de los consagrados.


Las reformas realizadas han dado como resultado una sala en forma de «L», con capacidad para bastante obra. La iluminación ha sido muy cuidada, así como la ambientación conseguida a base de una gran templanza de materiales.


Con la presente sala son ya nueve las existentes en nuestra ciudad, de ellas seis a pleno rendimiento. También nos llegan noticias de la próxima apertura de dos salas más.


EL «EQUIPO CRONICA»


Desde el catálogo de presentación. los póster, hasta llegar a la obra propiamente dicha, se presenta el «Equipo Crónica» con un sello muy personal, que se caracteriza por un planteamiento cultural y contracultural, que, sin entrar en conflicto, produce un resultado final sugestivo, cromático y lleno de intencionalidad crítica.


Cada obra es por sí sola motivo de una profunda reflexión que nos lleva irremisiblemente a una interpretación del mundo actual y sus secuelas, utilizando como soporte bien la caricatura de obras de arte conocidas, bien un cromatismo a veces desgarradoramente chillón e hiperrealista, y a veces con efectos que llegan a constituir tan impacto mesurado en el color y acertado en la composición de «collage».


Las tiradas de 75 ejemplares en serigrafía son también una posibilidad popular del arte que incide positivamente en la difusión a través de la repetición de la obra y del consiguiente abaratamiento —no más de cuatro cifras en el precio de una obra perfectamente numerada—.


Es este otro arte, que indiscutiblemente choca en una concepción clásica de la obra de arte y su comercialización, del artista —son dos los que forman el «Equipo Crónica»— y su quehacer aquí ahora en esta sociedad y en este momento.


El mismo sentido de «crónica» aprehendido por el equipo puede ser significativamente esclarecedor sobre la «funcionalidad» del arte que se presenta en esta nueva sala.


Otro aspecto positivo —consustancial a mi entender con la obra pictórica— es el sentir estético, decorativo, que presenta la obra del «Equipo Crónica». Sus denuncias no son absolutamente desagradables o groseras: son más bien surrealismos agradables nacidos de obras ya percibidas por nuestros sentidos —Goyas, Sauras, Velázquez, etc.— y que se han «deformado» en el color —no siempre—, conservando un algo de la forma primitiva y añadiéndoles esos trozos -hiperrealismo— que le condicionan su expresividad.


Se podrá discutir al "Equipo Crónica», se podrá decir que «falta el lienzo», incluso que «dicen demasiado», pero lo que no cabe duda es que la obra presentada tiene un indudable valor en el panorama artístico de la ciudad, tanto porque viene a cubrir una laguna de las obras presentadas este curso, como por el valor intrínseco que tiene la labor de este equipo.


Una exposición, en resumen, que no conviene perderse, y que casi hasta se puede comprar sin grandes esfuerzos, que ya es decir, en este mundo del arte que nos ha tocado vivir.


E. O.


Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 17 de mayo de 1974
Foto tomada de Internet

viernes, 10 de febrero de 2012

Ruíz Giménez en Córdoba

Que Ruiz Jimenez dijera estas cosas en 1974 no era fácil. Tampoco recogerlo en una crónica. De ahí esa cierta ambigüedad en su redacción.

RUIZ - GIMENEZ

“A pesar de sus defectos, nada como la democracia y sus instituciones”

"LA DEMOCRACIA, INÚTIL SIN REFORMA CULTURAL Y SOCIO-ECONÓMICA"


Con ambiente de expectación y lleno total se celebró en el salón de actos de la Obra Cultural del Monte de Piedad y Caja de Ahorros la anunciada conferencia que, organizada por el Círculo Cultural Juan XXIII, estuvo a cargo don Joaquín Ruiz-Giménez.


Tras la presentación del conferenciante por don Juan Luna, Vicepresidente del Círculo, el señor Ruiz-Giménez comenzó su disertación lamentando que se tuviera que celebrar a «puertas semíabiertas», lo que establecía cierta relación, siguió diciendo, con el tema de la conferencia que era algo así como crisis y esperanza en la aplicación de los derechos humanos.


Los comienzos fueron muy de la tierra al citar a Séneca en «el hombre, sagrada cosa para el hombre», precisando el debido respeto que se debe tener, tanto desde esferas de fe cristiana como de ideologías agnósticas, siendo el objetivo de su intervención un intento de hacer tomar conciencia a los asistentes sobre la lucha a plantear en pos de los derechos humanos y la democracia.


PRENSA DE MADRID


La segunda cita de la noche fue de un diario madrileño del día que había afirmado que «la democracia es el caballo de batalla del terrorismo». Después de preguntar si esto era verdad, pasó a hacer un análisis de la crisis de la democracia, tanto en lo relativo a los derechos humanos como a las libertades personales.


Para afrontar este panorama  indicó que era preciso abandonar la vieja división este-oeste y Hablar de hemisferio norte y sur, cuyo choque hemos presenciado estos últimos meses con las crisis energéticas y de materias primas


Crítica de la democracia liberal, nacida ya en el siglo XVIII. y que liega hasta nuestros días en las propias declaraciones de los candidatos presidenciales franceses. También analizó la crisis de las instituciones políticas democráticas. Tras ambos análisis manifestó que con defectos o no, mejor eran la democracia y las instituciones parlamentarias que su ausencia.


El análisis abarcó también a Portugal y su últimos acontecimientos, así como a los países orientales, especialmente Romanía y Polonia.


SOLUCIONES Y ESPERANZAS


Las soluciones a estas crisis las resumió en un crear instituciones democráticas, donde no existan, y de perfeccionarlas donde las haya. La no vinculación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos con los países que la aprobaron, encuentra ahora cierta esperanzadora posibilidad con la creación de un comité donde denunciar las violaciones de tales derechos, comité que lleva recibidas ya varios miles de denuncias.


El pacto europeo del 66 también presenta una esperanzadora realidad con el creciente acopio de ratificaciones que está recibiendo en los últimos años, lo que hace suponer épocas mejores para la existencia de derechos y libertades humanas.


Pero el señor Ruiz-Giménez afirmó que esto produce esperanza, pero no debe bastar. Señaló como libertades claves que justificaban la lucha por la libertad, la libertad de conciencia, la libertad de expresión, la de reunión y asociación —con nueva referencia directa—, y el derecho a la participación política.


Pero de nada valdría sostener democracias liberales —siguió diciendo— sí no se producen auténticas reformas de las estructuras socio-económicas y culturales.


En Europa —señaló— se camina hacia una, ineludible reforma estructural que conlleva a socializar determinados medios de producción, que si bien al principio deberán contar con un mínimo de coord¬nación estatal, llevará a una plena autogestión.


FINAL


Al final de la aplaudidísima intervención Ruiz-Giménez volvió a señalar la necesidad de trabajar unidos en lo convergente, caminando juntos hacia una reforma evolutiva, aunque siempre con un exquisito respeto a creencias e ideologías personales y rechazando de plano la violencia.—E.

Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 12 de mayo de 1974
Foto tomada de Internet

sábado, 4 de febrero de 2012

No era fácil conseguir que los grandes personajes de la vida local se avinieran a publicar en la prensa progre. Esta es una rara excepción y un curioso tema por los datos que aporta

Los jardines de Córdoba

 
Cuando la marquesa de Casa Valdés ha publicado el año pasado su magnífica obra titulada «Los jardines de España», con erudito texto y espléndida ilustración gráfica, ha sentado la afirmación de que el venerable abuelo de todos los jardines españoles es el hallado en Medina Azahara, la ciudad de los Califas, a la distancia de una legua de la capital cordobesa.

En la gran terraza central de la medina califal, la llamada «satih alkibla», recorrida por tarjetas pintadas en rojo, y presidida por un elegantísimo pabellón, rodeado de «los paríales» o pórticos de arquerías sostenidas por columnas de mármol, este pabellón central, llamado Dar alrujam o Casa de Mármol, era el paso obligado de los visitantes de nota, que habían de descansar en sus naves decoradas a estilo califal, en tanto que un complicado mecanismo bizantino les permitía llegar a la presencia del Emir almumenin o jefe de los musulmanes.


Toda la gran terraza plantada de jardines estaba cruzada por un hermoso «rasif» de sillares, que permitían al paseante admirar los primores florales cultivados bajo setos de arrayán, la «murta al-raihán» o mirto de olor, con cuya estructura se creaba el modelo de jardín andaluz que había de pasar a la posteridad como prototipo de nuestros vergeles meridionales, ya fuere en los territorios del reino granadino, todavía ocupados por los islamitas o bien en los alcázares mudéjares de Sevilla y Córdoba, ya conquistados por la cristiandad.


Nada más lejos de nuestro clasicismo jardinero que las platabandas de césped, con el típico «gazón» de los jardines centroeuropeos, muy bello a la vista, como sábana de verdor, pero que necesita intensos cuidados, riego diario por aspersión y respeto público, factores difíciles de conseguir en nuestro medio, como atinadamente denuncia en la prensa local la distinguida dama cordobesa doña Rosa de Cisneros.


El efecto visual de verdor se consigue en el jardín hispano-árabe, con los setos o perfiles de arrayán mirto, que ocultan el pardo terroso de los cuadros, más propicios al arbusto o planta baja de rosales, geranios y aún flores de semilla, y regados de pie con el chorro de agua que corre por los almatriches.


Señala la dama que citamos el deplorable efecto que causan en un jardín esos pedruscos o grandes trozos de roca que ahora es costumbre colocar en los cuadros, y desata sus tonos elegiacos cuando habla de las podas duras y casi exterminadoras a que son sometidos los árboles de paseos y lugares públicos, verdaderamente indignantes para un espíritu culto y enterado.


Otra fina dama cordobesa, que ha regresado de Washington, donde ha visitado un hijo diplomático, hablando de la irracional e inútil poda a que son sometidos nuestros árboles de sombra, describía la capital federal de los Estados Unidos, diciéndonos que así como en casi todas las ciudades del mundo culto hay árboles entre las casas, en aquélla hay casas entre los árboles, porque allí, nos confirmaba con acentos de esperanza, los árboles de sombra no se podan nunca.


Alguna vez, como sucedió en Sevilla en la Exposición de 1929, al confiar al gran jardinero francés Porestier la reforma del bellísimo Parque de María Luisa, que acababa de reformar los jardines públicos de Marruecos, bajo la égida del protectorado, una mano sabia cuida el arbolado, y renace la hermosa tradición jardinera hispanoárabe.


Estos temas serán tratados expresamente el año venidero en la Universidad de Harvard, en los Estados Unidos, en un simposio sobre jardinería hispano-árabe que allí se organiza, y al que suponemos acudirán nuestros expertos en las artes de cuidar árboles y flores, que constituyen una delicada especialidad facultativa, no sacada todavía en nuestro país de rústicos conceptos. Evocamos con ello las escuelas de jardinería, tan abundantes en muchos países, de la que tuvimos en Córdoba un fugitivo intento hace unos años, prontamente extinguido en e' vendaval edilicio de ideas y proyectos


RAFAEL CASTEJÓN

Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 25 de abril de 1974