jueves, 28 de abril de 2011

Entrevista con Manuel Mampaso

Como se aprecia la SGAE no ha sido siempre tan eficaz. Véase esta increible entrevista con Manuel Mampaso y la estafa que le perpetraron en la Transición

«LOS MURALES DE FRANCO Y JUAN CARLOS SE HICIERON SIN MI PERMISO»

Córdoba, lo abstracto y lo árabe se conjugan perfectamente

Manuel Mampaso, asesor de la Galería «Studio 52»


Manuel Mampaso ha estado en Córdoba. Manuel Mampaso es el autor, entre otras muchas cosas de esos grabados de Franco y de Juan Carlos que ilustran los murales que se hicieron a la muerte del primero y la proclamación del segundo.
Mampaso ha estado en la Galería Studio 52 asesorando sobre la actividad de esta sala en el curso próximo que promete ser intenso, y fundamentalmente planteando lo que puede ser una línea de actuación en colaboración con galerías madrileñas. Con Mampaso hablamos en la citada sala...

—¿Qué supuso para ti la ilustración de estos murales de Franco y Juan Carlos que inundan el país?
—No sé, en principio es muy delicado hablar de esto porque fue una estafa.

—¿Cómo?
—Sí, eran unos aguafuertes que me habían encargado para una tirada limitada de unos cien ejemplares para algunos despachos, y después me encontré con la sorpresa de que sin mi permiso ni nada pues se emplearon para hacer otras tiradas de millones y millones de ejemplares.

—¿Cómo no reaccionaste legalmente?
—Fue todo muy desagradable, porque además esto está asociado a una etapa muy trágica de mi vida que fue la muerte de una hija mía en ese mismo tiempo. Quizás por eso transigí porque el asunto era para llevar a los tribunales a todos los que habían intervenido en él.

—¿No te han pagado nada por ello?
—No, nada. Me pagaron los grabados originales, pero no la edición de éstos en millones de ejemplares que, insisto, se hicieron sin mi permiso.

LO ÁRABE Y LO ABSTRACTO

—Bien, dicho queda. ¿Dónde está ahora el quehacer de Mampaso?
—Desde hace cinco años he vuelto de nuevo a la pintura. Tengo preparadas mis exposiciones para este año, en la Teo de Madrid. Seguiré con mis decoraciones de teatro, mis dibujos, mis ilustraciones. Esto es lo que hago desde hace muchos años y lo que pienso seguir haciendo.

—¿Cómo ves Córdoba a través de esa abstracción?
—No lo sé. Pero te voy a decir algo muy significativo: el año pasado me hablaron de ir a restaurar unos palacios almorávides en Rabat, y al ponerme en contacto con el arte árabe encontré unas posibilidades brutales de adaptación del arte abstracto y del arte árabe.

—¿Se puede expresar en arte abstracto la ciudad de Córdoba?
—Si es que precisamente lo árabe es abstracto, porque ellos evitaban la tentación figurativa. La adecuación es perfecta.

—¿Qué es lo que más te gusta de Córdoba?
—Todo, me ha encantado todo el barrio antiguo, el barrio de la Mezquita Toda esa parte es maravillosa.

E. O.

Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 8 de junio de 1978