Una foto rechazada obtiene premios nacionales e internacionales de turismo
Los incondicionales de Televisión Española de mediodía pudieron observar, hace unas fechas, una información en la que se comunicaba la consecución de unos premios internacionales de carteles de turismo otorgados en Italia.
Los que tengan buena memoria recordarán un nombre, Luis Pascual Sanchís. Era uno de los tres españole ganadores, pero, de todas formas,: es probable que no les dijese mucho.
Los que tengan buena memoria recordarán un nombre, Luis Pascual Sanchís. Era uno de los tres españole ganadores, pero, de todas formas,: es probable que no les dijese mucho.
Sin embargo, la noticia surgió en nuestra ciudad, donde Luis Pascual Sanchís ha sido protagonista de una historia que, a pesar de un final tan feliz, tiene un planteamiento triste y dramático.
Tradicionalmente, los carteles de feria de mayo de Córdoba han sido elegidos entre los realizados por los numerosos artistas pintores que conviven en la ciudad. Ciertamente, los resultados de tales concursos, quizá por ser demasiado reiterativos en los mismos vencedores, perdieron interés en los últimos años.
A esto se unió quizás el deseo de mejorar con las técnicas de la época, la confección de un cartel que tenía como finalidad proclamar a los cuatro vientos las excelencias de nuestras fiestas. .
Con tal motivo, el Ayuntamiento convocó un concurso abierto entre fotógrafos, para elegir aquella foto que mejor pudiera ir con la finalidad del cartel. De cuyo concurso —estamos en 1970— dimos buena cuenta en su día: una composición con fondo de puente romano y algunos elementos folklóricos de la tierra.
NO REÚNE CALIDAD ARTÍSTICA
Y fue, precisamente, a este concurso al que intentó acudir Luis Pascual Sanchís, y donde empieza el drama.
Luis Pascual Sanchís era estudiante de ETEA, estaba a punto de-terminar la carrera. Como fotógrafo, es calificado por los profesionales de la ciudad, como «una auténtica promesa».
Su calidad fotográfica fue puesta de manifiesto en los cientos de fotos de la tierra, así como en sus viajes a Nueva York y a Suecia. Con sus veintiún años, la cámara no tenía secretos para él, y su inquietud fotográfica se ha quedado plasmada en su obra, que, próximamente, podremos observar en una exposición póstuma.
Y Luis Pascual Sanchís, con su ilusión a cuestas, acudió al mencionado concurso. La foto fue rechazada, pues, al parecer, «no reunía la suficiente calidad técnica». Así lo atestiguan todos sus amigos y profesionales, que le admiraban en su quehacer.
Luis Pascual Sanchís la presentó entonces al concurso organizado por el Ministerio de Información y Turismo y ganó el primer premio nacional. Está reproducida miles de veces en los carteles turísticos que edita el Ministerio. Curioso, ¿verdad?
Se trata de una moza de la tierra, a caballo, vista por detras, cayéndole la mata de pelo, que está coronada por un clavel. La reproducimos en este reportaje, aunque no se aprecie el color.
Por su parte, el Ministerio la presentó a un concurso internacional y obtiene, como indicamos al principio, el Premio de la Crítica al Turismo en Italia y el Primer Premio a la Crítica por los fotógrafos europeos.
Es una pena que Luis Pascual Sanchís no pueda recoger ya el premio a su saber hacer, pues murió en un desdichado accidente de aviación el 10 de septiembre de 1972. Es una pena que muriera con el disgusto de ese rechazo del jurado cordobés.
Ahora, en septiembre, una prestigiosa galería de Córdoba expondrá una parte de su valiosa obra. Y, por supuesto, el cartel. Un cartel rechazado en su tierra, y que, sin embargo,ha conseguido el reconocimiento jurados internacionales.
Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 3 de agosto de 1973