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Ribera: Ha pasado un año
La Nacional IV pasa por la Ribera.
En su día informamos que quien se oponía era un grupo de ciudadanos e intelectuales, según la prensa de Madrid, que no querían que no se arreglara tan horrible punto —el que así lo creyere demostró no tener muchas luces—, sino que se arreglase con la solución propuesta.
De todas formas el asunto pasó. Lo mismo que ha pasado el año y la Ribera no es que esté igual, sino peor, porque al igual que pasa con la vejez, las arrugas se acentúan en ella hasta límites preocupantes.
Lástima que en la reciente asamblea el tema no saliera —qué ocasión de pedir una amigable explicación perdieron los asistentes—, pero lo cierto es que en exacta información que nos ofreció nuestro compañero Cerrato, el asunto «non se meneó».
Los camiones siguen su vieja cantinela de pasar cerca da ios muros de la Mezquita —monumento internacional—, dejando su vibración, su polución y su ruido.. El tráfico es increíblemente difícil y los camioneros —hemos sondeado a varios— odian literalmente —encima— pasar por esta ciudad
Ribera, ojalá sin tamo triunfalismo como el desplegado en otras ocasiones, un día nos -anuncies tu rápido rejuvenecimiento
Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucia el 10 de agosto de 1974
Foto
http://www.flickr.com/photos/eosunao/2446307956/in/set-72157601235278499
Y aquí puede verse una pequeña colección sobre el tráfico y el estado de la Ribera en esa época
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POLEMICA SOBRE EL PROYECTO DE DOS NUEVOS PUENTES
La exposición al público del proyecto de accesos a Córdoba, desde la autopista de Andalucía, suscita nuevamente la polémica sobre el desdoblamiento de calzada de la carretera N-IV, a su paso por la ciudad junto al río Guadalquivir.
Si el proyecto de 1972, sobre desdoblamiento de la travesía urbana de la carretera Madrid Cádiz, produjo una radical apreciaón ciudadana de daño irreparable para los valores urbanísticos, ambientales, pintorescos y etnológicos trieos que el Paseo de la Ribera tiene para Córdoba, este proyecto de los correspondientes servicios técnicos del Ministerio de Obras Públicas ha sido acogido con la mayor satisfacción, tanto de los sectores oficiales —en aquella ocasión a favor —como de los meramente cívicos— entonces en contra.
La polémica está en la cuestión planteada ahora con el proyecto de dos nuevos puentes sobre el Guadalquivir, uno de ellos con dos subenlaces que se abren al punto de la Choza del Cojo, y otro a !as cercanías del estadio del Arcángel, que evitarían que el tráfico pesado incida sobre la zona de la Ribera. En estas condiciones, sería factible una reforma del desdoblamiento que, modificando el área cercana al Guadalquivir, hiciera posible la mejora integral de la actual travesía sin convertirla de hecho en «vía rápida», y en «lugar de especial contaminación» (vibraciones, humos, ruidos .) en las cercanías de un monumento internacional, como es la Mezquita-Catedral.
Los cordobeses ahora están de acuerdo, mientras que con el anterior proyecto se dividieron, según las ideologías urbanísticas imperantes, entre quienes defienden la ciudad o se sirven de ella.
La posible «asociación de amigos de la ciudad de Córdoba», que tantos simpatizantes cuenta, incluso antes de su nacimiento oficial, podría iniciar su vida cívica con esta iniciativa en favor de un Paseo de la Ribera para los cordobeses, lugar histórico, con especiales valores ambientales, pintorescos y etnológicos que defender.
A. J.
Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucia el 24 del agosto de 1974
Foto del reportaje, sin citar autoria. Curiosa vision de los Sotos
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