viernes, 17 de febrero de 2012

Nueva Sala de Arte en el Círculo Juan XXIII

La labor de las salas de arte en el tardofranquismo fue esencial en la "apertura". El Juan XXIII también se sumó a esta labor a través de su propia sala, en este caso comprometida como el resto de su labor

SE INAUGURO LA SALA DE ARTE DEL CIRCULO CULTURAL JUAN XXIII



EL "EQUIPO CRÓNICA" PRESENTA PARTE DE SU OBRA

Quedó inaugurada la sala de exposiciones del Círculo Cultural Juan XXIII, con una muestra del «Equipo Crónica». Dicha exposición permanecerá abierta de 7,30 a 9,30, en la sede de la institución cultural, sita en Romero de Barros, 10.


Esta nueva sala que se añade a las ya existentes en la ciudad quiere tener, según intención de la directiva del Juan XXIII, un carácter netamente popular que obligará por una parte a presentar artistas lejanos de una línea comercial y mercantil del arte, y por otro, ofrecer posibilidades a nuevos artistas que tienen serias dificultades de presentar su obra en las salas de los consagrados.


Las reformas realizadas han dado como resultado una sala en forma de «L», con capacidad para bastante obra. La iluminación ha sido muy cuidada, así como la ambientación conseguida a base de una gran templanza de materiales.


Con la presente sala son ya nueve las existentes en nuestra ciudad, de ellas seis a pleno rendimiento. También nos llegan noticias de la próxima apertura de dos salas más.


EL «EQUIPO CRONICA»


Desde el catálogo de presentación. los póster, hasta llegar a la obra propiamente dicha, se presenta el «Equipo Crónica» con un sello muy personal, que se caracteriza por un planteamiento cultural y contracultural, que, sin entrar en conflicto, produce un resultado final sugestivo, cromático y lleno de intencionalidad crítica.


Cada obra es por sí sola motivo de una profunda reflexión que nos lleva irremisiblemente a una interpretación del mundo actual y sus secuelas, utilizando como soporte bien la caricatura de obras de arte conocidas, bien un cromatismo a veces desgarradoramente chillón e hiperrealista, y a veces con efectos que llegan a constituir tan impacto mesurado en el color y acertado en la composición de «collage».


Las tiradas de 75 ejemplares en serigrafía son también una posibilidad popular del arte que incide positivamente en la difusión a través de la repetición de la obra y del consiguiente abaratamiento —no más de cuatro cifras en el precio de una obra perfectamente numerada—.


Es este otro arte, que indiscutiblemente choca en una concepción clásica de la obra de arte y su comercialización, del artista —son dos los que forman el «Equipo Crónica»— y su quehacer aquí ahora en esta sociedad y en este momento.


El mismo sentido de «crónica» aprehendido por el equipo puede ser significativamente esclarecedor sobre la «funcionalidad» del arte que se presenta en esta nueva sala.


Otro aspecto positivo —consustancial a mi entender con la obra pictórica— es el sentir estético, decorativo, que presenta la obra del «Equipo Crónica». Sus denuncias no son absolutamente desagradables o groseras: son más bien surrealismos agradables nacidos de obras ya percibidas por nuestros sentidos —Goyas, Sauras, Velázquez, etc.— y que se han «deformado» en el color —no siempre—, conservando un algo de la forma primitiva y añadiéndoles esos trozos -hiperrealismo— que le condicionan su expresividad.


Se podrá discutir al "Equipo Crónica», se podrá decir que «falta el lienzo», incluso que «dicen demasiado», pero lo que no cabe duda es que la obra presentada tiene un indudable valor en el panorama artístico de la ciudad, tanto porque viene a cubrir una laguna de las obras presentadas este curso, como por el valor intrínseco que tiene la labor de este equipo.


Una exposición, en resumen, que no conviene perderse, y que casi hasta se puede comprar sin grandes esfuerzos, que ya es decir, en este mundo del arte que nos ha tocado vivir.


E. O.


Publicado en la edición cordobesa de El Correo de Andalucía el 17 de mayo de 1974
Foto tomada de Internet